viernes, 22 de octubre de 2010

¡Papelón sin nombre!

Hasta el “Odontólogo” Nazareno batió el arco “amarillo”. El marcador fue contundente de 3-0. Los aficionados corearon: “fuera Maruri....fuera Maruri”. Ya son 6 fechas sin ganar. ¡Qué vergüenza!...


Un fuerte ventarrón en el Monumental anunciaba un mal presagio antes del inicio del partido. Había un olor a muerte. Las gradas estaban vacías. Los pocos barcelonistas, considerados por muchos como masoquitas fueron para ver la reacción “amarilla”, pero aquello no sucedió.

Ni los periodistas asistieron al palco de prensa. Es que nadie da dos reales por el fútbol “torero” ni siquiera sus directivos, muchos de ellos abandonaron el estadio antes de finalizado el desastre deportivo que marcó la noche más triste para un ídolo.

Tampoco el “Poeta” Insúa ha podido recuperar a este elenco que hace siete fechas no conoce de la victoria con 6 derrotas seguidas. Ninguno de los jugadores vale que se lo considere. Uno más malo que otro. Por ahí algo quiso hacer Juan Anangonó en el segundo tiempo, pero una “golondrina no hace verano” y tanto esfuerzo no valió para nada.

Y qué decir de ese “Chucho” Bolaños, quien es un fiasco, una estafa al fútbol “canario”. No genera nada de fútbol de medio campo hacia arriba y por eso el técnico lo sacó para que ingrese Anangonó.

La ofensiva era tan tímida y mediocre, de remate la irresponsabilidad sin nombre de José Luis Perlaza de hacerse expulsar tontamente, perjudicando rotundamente al equipo y sin importarle las consecuencias.

Lanzaron huevos
A los 61 minutos, el poco público presente en la general sur del estadio comenzó a lanzar huevos hacía la cancha. Uno de ellos impactó con fuerza a un integrante “policial”. La mesa de control tuvo que realizar una advertencia a la gente, caso contrario se iba a suspender el encuentro.

El resultado 3-0 de Espoli colmó la paciencia de la hinchada. Felizmente eran pocos en el Monumental, sin embargo en los exteriores hubo una piedriza donde fueron malogrados varios vehículos. La Policía detuvo a un hincha.
Además, comenzaron a corear “fuera Maruri...fuera Maruri”; mientras el presidente de Barcelona daba la media vuelta y salía con su seguridad personal. Su permanencia en el club lo pensará seriamente, por cuanto no aguanta más.

Los carteles, a pesar de que hubo impedimentos por parte de la fuerza policial, salieron a la luz pública por el sector de las suites. Uno de ellos muy fuerte que decía “mitómano descarado” o “basta Maruri”.

El papelón barcelonista es tan grande como el Monumental que en la tabla de la segunda etapa descendió al séptimo lugar al mantenerse con 20 puntos -1 de gol diferencia, siendo superado por Manta con 22 y El Nacional con 20; mientras en la tabla acumulada con 63 puntos y 13 de gol diferencia lo acecha el D. Cuenca con 62+9 y D.Quito 58+9. Las posibilidades de clasificar a la Copa Libertadores se convirtieron en mínimas.

La próxima contienda de un ídolo destrozado será el domingo, a las 12:00, con U.Católica en el Atahualpa.

Espoli, con este amplio e inesperado marcador de 3-0, se alejó del fantasma del descenso al contabilizar 38 puntos -24 de gol diferencia. Su próximo cotejo será con El Nacional en el estadio de Santo Domingo.



Les pintaron la cara
Espoli comenzó a pintarles la cara a los “amarillos” a los 30 minutos del partido cuando Cristhian Márquez marcó el primer gol luego de aprovechar una falla defensiva y un mal despeje de Geovanny Nazareno. El delantero “policial”, que aprovechó un pase larguísimo de Freddy Nazareno, paró la bola y definió con clase.
A los 57 minutos, los pocos barcelonistas corearon: “no...no...no” para que el técnico Insúa no haga ingresar al “paquetazo” de Sánchez Prete, de todas formas lo hizo minutos más tarde.
A los 58 minutos se va con roja José Luis Perlaza, quien entró a la cancha como si hubiera comido carne de tigre. Fajó a Márquez y luego a Nazareno.
A los 75 minutos, el ex volante “amarillo” Mario Lastra anotaba un golazo de lanzamiento libre. El zurdazo fue impresionante, difícil para la atajada del arquero Banguera.
Y cuando el partido agonizaba hasta el “Odontólogo” Nazareno batió la portería “canaria” ante las caras largas de la hinchada. Un 3-0 sin discusión y excusa
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