La jugada del golero Pablo Santillo, quien fue hasta el área rival para buscar un cabezazo, y el contragolpe fallido de los albos le dieron un emotivo final a un partido que parecía liquidado desde el primer tiempo.
Con la derrota 2-1 sufrida frente a Liga de Quito, ayer en Casa Blanca ante unas cuarenta mil personas, Barcelona quedó lejos de la corona.
Los cuatro hombres en el fondo eran prácticamente zagueros fijos, con poca salida. Los volantes tampoco tenían proyección. Solamente Cristian Lara o Mike Rodríguez (nunca los dos al mismo tiempo), se sumaban al sacrificado Pablo Palacios en el ataque.
Además, Barcelona cedió la pelota a su rival desde el inicio. Se dedicó a cerrar los espacios, buscando por todos los medios sacar su portería en cero.
La primera llegada con peligro al arco albo fue recién a los 27 minutos, cuando Palacios remató y Alexander Domínguez retuvo el balón. La segunda y más clara para los canarios fue dos minutos después, cuando, entre Domínguez y Diego Calderón, salvaron cuatro remates seguidos.
Pero todo fue un espejismo, porque Barcelona siguió mostrando un juego muy conservador, aún más cuando el lateral Omar de Jesús salió expulsado a ocho minutos del descanso.
Liga se sintió con mayor libertad para atacar. Prueba de ello es que el primer gol, a los 43 minutos, es jugada de los dos carrileros. Paúl Ambrossi llegó por izquierda y metió el pase al otro costado, para que Néicer Reasco solamente empuje la pelota al fondo del arco.
El plantel guayaquileño no salió de ese golpe psicológico cuando vino el segundo. En el último minuto adicional, Claudio Bieler recibió un balón en el área y con pierna izquierda venció a Santillo.
En el segundo tiempo Barcelona no fue a buscar el descuento, se dedicó a cuidarse de la goleada. Incluso, ingresó el volante de contención Marlon Ayoví y salió el mediapunta Cristian Lara.
Solamente en una jugada individual, Pablo Palacios se dio modos para vencer a los tres zagueros centrales y sacar un potente disparo de izquierda para descontar a los 67 minutos.
Fue el primer ataque del cuadro costeño en el segundo tiempo. Merlo dispuso el ingreso de Marcelo Delgado por Jairo Montaño, buscando el milagro. Pero, inmediatamente fue expulsado Fernando Hidalgo por una supuesta agresión contra Diego Calderón.
Con nueve hombres Barcelona perdió las pocas esperanzas que tenía de sumar al menos un punto. (JLV)
Ya no se qué más decir. En la primera amarilla sí entré con todo, pero en la segunda solo busqué cerrarle el paso de forma lícita. Con arbitrajes como estos no se puede”.
Omar de Jesús, Defensa
Fuente: Expreso
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